Los operativos de fumigación y desinfección se realizan luego de las 18 horas para asegurar una mayor efectividad en el control del mosquito y para minimizar posibles inconvenientes al normal desarrollo de las actividades diarias de los vecinos. Asimismo, se están utilizando agentes aplicadores de larvicidas como el Bacillus Thuringiensis In Elens (BTI), que se coloca en fuentes de agua estancada que no pueden ser eliminadas, para evitar la proliferación de larvas.

El Municipio también recomienda a los vecinos y vecinas tomar medidas preventivas para evitar la acumulación de agua en sus hogares, como la limpieza diaria de bebederos de animales, el mantenimiento adecuado de tanques y canaletas, y el uso de pastillas de cloro en las piletas. Además, se aconseja renovar frecuentemente el agua de floreros, ollas y frascos, y colocar boca abajo recipientes como botellas y baldes que puedan acumular agua.

La utilización de repelentes y la instalación de mosquiteros en las ventanas, cunas y cochecitos también es fundamental para protegerse de las picaduras del mosquito.

El Municipio destaca la importancia de estar atentos a los síntomas del dengue, que incluyen dolor de cabeza, erupción y enrojecimiento de la piel, dolores en las articulaciones y fiebre superior a los 38°C. En caso de presentar estos síntomas, se recomienda no automedicarse y acudir al centro de salud más cercano.

Para obtener más información o realizar consultas, los vecinos pueden dirigirse al Programa de Vigilancia Epidemiológica, que funciona en el Polo Sanitario de Salud, ubicado en Av. Del Libertador 750, o comunicarse al teléfono (0237) 466-9210, Interno: 2030, de lunes a viernes de 8 a 17 horas.